sábado, 15 de agosto de 2015

Un millón de cosas que me hacen feliz...

Mis listas son interminables... creo que empieza a ser patológico, pero cuando la lista se llama COSAS QUE ME HACEN TREMENDAMENTE FELIZ simplemente sonrío y me dejo llevar. 

Mis dedos han sujetado el bolígrafo con fuerza confiando en que hubiera tinta suficiente... Luego cuando he leído lo que he escrito, me ha dado la risa... porque encuentro la felicidad en las pequeñas cosas de forma que resulto muy básica, pero lo importante es que: 

BÁSICAMENTE, SOY FELIZ 

Así que, al transferir lo escrito en mi agenda a este blog he tenido que añadir a la lista algo que creo que tengo claro qué es lo primero que debería aparecer:
  • Hacer listas interminables de cosas que me hacen feliz y darme cuenta que si es interminable es porque la mayor parte del tiempo soy feliz y, sobre todo, sé dónde encontrar la felicidad. Pues me rodea.

MI LISTA DE AGOSTO DEL 2015 DE COSAS QUE ME HACEN MUY FELIZ
  • Leer. Sobre todo, una historia sencilla y tierna sobre la vida de distintas mujeres que luchan por sobrevivir en un mundo complicado. Y que se complica aún más. Mujeres que a veces buscan respuestas y otras, simplemente, las encuentran.
  • Escribir, sobre todo, en mi blog. Mi blog se ha convertido en la prolongación de mi mente y una forma de abriros mi casa a tod@s. A veces, en todas las casas hay ruido. Lo siento onco-amigas. 
  • Ir a la playa un día, así, porque me da la gana. Aunque nos muramos de frío un día y al otro, sólo pisemos el chiringuito. 
  • Captar momentos con la cámara. Tanto o más que describir lo que ven mis ojos. Cuando veo las fotografías, no son fotografías. Son viajes en el tiempo.
  • Estrenar zapatos. Estrenar ropa. Estrenar zapatos y ropa que he comprado en rebajas superbarato. No creo que tenga que explicar por qué. 
  • Comprar online. Es tan sencillo. Me hace sentirme afortunada por vivir en este siglo. Sobre todo, si son cosas insignificantes. 
  • Tener el pelo rizado. Básicamente, porque no me tengo que preocupar por planchas y secadores... 
  • Hacerme una cola nivel pompón. Mido el tiempo que transcurre en base a la longitud de mi pelo. Más pelo, más años viva.
  • Que un loco bajito me llame tita. 
  • Que un loco bajito me deje comérmelo a besos.
  • Ver que Anto es más travieso aún que esos locos bajitos y que los vuelve aún más locos a todos. Sé que a sus padres no les hará tan feliz eso. 
  • Mis cuadernos llenos de mensajes. Así mis proyectos parecen más importantes. Tengo un problema con comprar cuadernos.
  • Descubrir que no hace falta explicar nada. Que no necesitas explicar nada. 
  • Volver a ver a mi familia danesa. Y celebrar juntos 60 años y un bebé, que viene de camino. Toni y yo celebramos menos, pero me hace inmensamente feliz celebrar estas cosas con ella. Seguro que ella también pensó un día que no estaría en este mundo para verlas. 
  • Mi práctica de yoga. Aunque voy y vengo con ella. Volver a ella me hace sentir feliz porque he decidido volver a ella. Continuamente.
  • Que un cambio en las pastillas que me tomo sirva. Ahora ya no tengo picores. Y sirve para que confíe mucho más en los oncólogos. 
  • Que un año más no necesito estar preocupada de donde hay un baño y de llevar tampones para ir a la playa tranquilamente.
  • Recordar Londres. Y tener el plan de volver.
  • Organizar las vacaciones del año que viene. Menorca, Córcega, Cerdeña, Croacia, Francia,... Hay tantos sitios. Ya se verá.
  • Comprar guías de viaje. Sí, aunque aún no sepa a dónde voy. 
  • Ikea. Todo en Ikea me eleva al Nirvana. Y encima ahora, venden cuadernos y material de oficina molón. Nirvana.
  • Mis leonas campeonas. Inma, Rosa, Virginia, Marta (e Isa, qué sé que estás ahí también). Por convertirme en la ratona campeona. Así, en un momento. Porque me río y me vuelvo a reír con ellas. Porque a pesar de los malos momentos, las pérdidas y las dificultades, siguen sonriendo y siguen cumpliendo sueños. Pronto llegará una nueva ratona. Y todas seremos mucho más felices. 
  • Descubrir nuevas terrazas-bar en Sevilla. Bueno, esto no me hace tan feliz. Mi peso no me hace feliz. Lo sobrellevo con el sueño de que llegue un otoño de orden alimenticio que me haga adelgazar y tener el cuerpo que nunca he tenido. Jejeje... 
  • Los helados de Lora. Y, sobre todo, que cierran fuera de la temporada de verano. 
  • Autoinvitarme a Dublín. 
  • Dormir tapada. Después de este verano tan tremendamente caluroso, llevar unos días durmiendo tapada me hace sublimemente feliz. 
  • ...
Hay algunas más. Bastantes más. 

Cuando caí enferma, acudí a una psicóloga especialista en pacientes oncológicos. Para que me ayudara a canalizar mis ideas y mis pensamientos., alborotados y negativos. Uno de los ejercicios que me mandaba era este. Escribir y hacer listas. Para que aprendiera a darme cuenta de que no hay nada tan negro que no se pueda volver de color. Rosa. Gracias a ella hago muchas más listas que antes. Es fundamental para mí plasmar en un papel todo aquello que me ilusiona, me da esperanza o me hace soñar. 

Es mi onco-consejo de esta humilde bloguera. Escribe. Haz listas. Búscate una libreta bonita. Llévala contigo. 

Pagué a una psicóloga para que me dijera lo mismo que Ana Belén, mi hermana o mi marido. Que hay que ir poco a poco, que tengo un millón de cosas por las que ser feliz y que si no las encuentro, me las invente. Lo más importante que aprendí estando con ella fue a contar hasta 10 antes de tomar cualquier determinación. Y , sobre todo, a no adelantarme a los acontecimientos. 


 

1 comentario:

  1. Si es que eres nuestra leona-ratona.villana favorita por meritos propios...

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